Un debate muy grande en la actualidad se da en comparación con otro similar, si el DJ es músico o no. Si toca o no. El productor musical clásico es aquel que hace la dirección de sonido en la mezcla y en los arreglos de una grabación. Tiene poder decisión sobre lo que se toca en el estudio, cuándo y cómo. También se encarga de eleborar presupuestos y coordinar a los artistas. Puede ser productor artístico o también ejecutivo, es decir, quien pone el dinero y dirige el proyecto desde arriba.
Sin embargo, el concepto hoy en día se ha modificado debido a la propia evolución de la profesión y de la industria musical.
El productor musical clásico desempeña un papel integral en la creación de una grabación. Sus responsabilidades incluyen la dirección del sonido en la mezcla y los arreglos, la toma de decisiones sobre lo que se toca en el estudio, cuándo y cómo se hace, y la elaboración de presupuestos y coordinación de artistas. Los productores pueden ser tanto artísticos como ejecutivos; los primeros se centran en la dirección creativa, mientras que los segundos gestionan la financiación y la supervisión del proyecto.
En décadas anteriores, con el trabajo analógico, los productores musicales generalmente eran músicos bien entrenados o de conservatorio, y también ingenieros expertos en física del sonido y áreas de la ciencia similares. La explosión de los sintetizadores a fines de los 70s y los inicios de la música synth-pop abrió una de las discusiones más grandes de la historia: ¿realmente estos tipos son músicos? si hablamos de sintetizadores monofónicos, al parecer no había que ser experto en armonía. Bandas como Depeche Mode, en sus comienzos, prácticamente se destacaron más en el ritmo, en lo bailable. Recibieron muchas críticas, igual que los punks de los 70s por tocar siempre los mismos tres acordes.
La aparición del house en Estados Unidos durante los años 80 volvió a cuestionar si estos nuevos artistas eran músicos en el sentido tradicional. DJs como Frankie Knuckles y Jesse Saunders, pioneros del house, provenían de la escena disco y hip hop, y no eran necesariamente expertos en teoría musical. Sin embargo, su influencia en la música global es innegable.
Con la llegada de los 2000, el término DJ se volvió más masivo. La pregunta entonces fue si estos DJs comenzaron a estudiar música de manera formal. Aunque muchos no lo hicieron, su habilidad para crear y manipular sonidos los coloca en una posición única dentro de la industria musical.
¿El DJ entonces es un músico?
¿Sabe algo de teoría?
Habría que preguntarle a cada uno.
Ya de por sí, esta es una discusión en vano, porque acá se trata de generar emociones en las personas, creando música y también haciéndola sonar.
En los 2000 se comenzó a hablar del DJ/productor. Volviendo a Frankie Knuckles y Jesse Saunders, no se los reconocía como expertos en teoría musical. Sin embargo, estos tipos fomentaron el sub-género de música electrónica que más se extiende por todo el mundo. Los criticaron de todas partes, pero los tipos siguieron y 40 años después son más recordados que muchos otros.
Observemos todas las habilidades que debe posseer un productor musical hoy en día:
- Lenguaje musical.
- Historia de la música.
- Síntesis y física del sonido.
- Grabación, producción, mezcla y mastering.
- Tecnología, hardware, software.
- Diseño web, diseño gráfico y programación.
- Marketing, negocios y relaciones públicas.
- Creación de contenido.
Creo que no hay que subestimar al productor, muchos están empezando y merecen el empujón o la ayuda que todos alguna vez quisimos tener. Se vienen ahora nuevas épocas en las que la inteligencia artificial presentará desafíos aún mayores.